Estela Baltasar Fernández Profesora secundaria FOL

Estela Baltasar Fernández – Profesora de secundaria de FOL

Estela, a nosotras nos inspiras, ¿quieres presentarte?:

Mi nombre es Estela Baltasar Fernández, tengo 35 años y soy natural de un pueblo de los Ibores, Navalvillar de Ibor (Cáceres).

Estudié la Licenciatura en Psicología en la Universidad de Salamanca, además de contar con diferentes másteres en Psicología Conductual, MBA en Dirección de Empresas, así como el Máster del Profesorado.

En mis comienzos, trabajé como dependienta, teleoperadora, todo mientras estudiaba, compaginando el trabajo con mis estudios. Empecé a trabajar en el mundo de los rrhh con 27 años, en el año 2016, trabajando en la Escuela de Negocios de la Universidad de Salamanca. Después de vivir 10 años en Salamanca, cumplí uno de mis “objetivos o metas” que era volver a mi Extremadura, y empecé a trabajar en Mérida en una Consultora de Recursos Humanos, Adverto Consultores, estando en contacto con empresas de toda Extremadura e, incluso, a nivel nacional. Después trabajé en Grupo Preving, en el departamento de recursos humanos, hasta que finalmente decidí lanzarme a la piscina y prepararme las oposiciones de secundaria, para ser profesora de FOL, objetivo que conseguí al entrar en lista ordinaria, y aunque queda un camino largo por delante hasta conseguir la plaza, lo importante es que ya estoy trabajando de profesora en el IES Extremadura de Montijo, desde septiembre de 2023.

¿A qué querías dedicarte?, ¿Por qué elegiste tu profesión?, ¿Te imaginabas desarrollando el trabajo que realizas hoy?:

De pequeña quería ser “escritora”, pero según iba haciéndome mayor, siempre quise ser psicóloga, de ahí que estudiase psicología.

Me gusta el trato con las personas, disfruto de ello y me considero una persona empática y con capacidad de escucha. Nunca me había planteado el ser profesora, pero trabajando en la empresa privada, tuve la oportunidad de dar diversas formaciones en empresas y me sentía muy cómoda, lo que despertó mi interés por la docencia. Realicé el Certificado de Profesionalidad de Docencia para el Empleo, para comprobar si realmente me gustaba este mundo, y eso fue lo que me hizo decidirme por la docencia.

Mi objetivo era un trabajo en contacto con las personas, donde poder enseñar y enriquecerme mutuamente.

Como he detallado anteriormente, me empezó a llamar la atención el mundo de la docencia puesto que me sentía cómoda cuando impartía formaciones, me gusta interactuar con los demás y no me cuesta expresarme, de ahí que me guste la docencia.

Además, considero que es un trabajo “gratificante”, aunque no siempre. Pero si tienes un grupo bueno, que se interesa, te escucha y ves avances y su evolución, es algo que te satisface mucho como persona y como profesional.

Para nada me imaginaba desarrollando el trabajo que realizo hoy, mi visión era verme como psicóloga en un consultorio de psicología conductual o en psicología clínica.

Háblanos de tus logros y de las dificultades que has encontrado en tu carrera profesional:

Como logros me gustaría destacar el haber podido volver a Extremadura, ya que no es fácil salir de tu Comunidad para estudiar y trabajar, y poder volver, siendo conscientes de las dificultades que tenemos los extremeños en cuanto a búsqueda y opciones de encontrar trabajos cualificados.

Otro de mis logros es haber podido llegar a donde he llegado, a base de muchísimo esfuerzo, mucha constancia y mucha dedicación, a pesar de no tener tiempo libre para disfrutar de tu familia, de tu pareja, sacrificando muchos aspectos de tu vida para poder llegar a estar donde estás hoy. Creo que esa capacidad de sacrificio es algo que me enorgullece, y aunque no siempre es fácil, el tener esa constancia y fuerza mental hace mucho.

Otro de mis logros más enfocado al aspecto de ser mujer es haberme hecho valer en un “mundo más de hombres” en el sentido de que, por ejemplo, cuando trabajaba en la empresa Adverto Consultores, tenía que reunirme y gestionar procesos de selección con muchas empresas, en la mayoría lideradas por hombres. En aquel entonces no tenía ni 30 años, por lo que hacerte valer y respetar, siendo menor de 30 años y, con el hándicap añadido, de ser mujer (puesto que te ven como una niña), creo que es otro de mis principales logros.

¿Qué consejos y sugerencias podrías hacernos?:

Que luchen por sus metas, que con constancia, mucha dedicación y paciencia, todo acaba llegando. Que no se queden en un segundo plano, que se hagan notar y valer.